¿Y si vamos a ver el castillo de Argüeso? Pues vale, ya que estamos...
Parada para hacer unas fotillas pero no abrían hasta las 11:00 y eran las 8:30!!! Así que sacamos unas fotos del interior que no pudimos ver...
Pero había un trozo de nieve de lo más apetecible... así que volvimos a nuestros orígenes con la nieve, a tirarnos con el paipo por la cuesta... jejeje.
Y ahora... ya que estamos de castillos... ¿nos vamos a ver el castillo de Aguilar? Venga...
Ermita de Santa Catalina a los pies del castillo.
Aaaaah del castilloooooo
Aquí cada uno inspeccionando a su bola... éste estaba peor conservado que el de Cantabria...
Vistas de Aguilar desde el castillo.
Y ya que estamos aquí... ¿y si nos vamos a Burgos? Venga.
Y allá que nos fuimos a Burgos.
A Irene le daba un poco de vergüenza el cantazo que pegábamos vestidas para esquiar paseando por Burgos pero Susana le dijo:
"Acuérdate lo que dice el abuelo que si tú estás caliente lo que piensen los demás..."
O sea se "Ande yo caliente, riase la gente"
Y después de un breve paseo nos dirigimos a la joya de Burgos, su catedral.
Realmente impresionante. Yo visité la catedral de Burgos lo típico, con el colegio en 8º de EGB y tengo fotos (de esas que se revelaban... ains, qué vieja soy) de la catedral toda gris. Es una maravilla verla ahora tan limpia y bien restaurada.
La entrada pelín carilla para los adultos: 7 euros, aunque compensamos con las niñas 1,50. No hubiera estado mal algún descuento por familia numerosa o por ser español (que les claven a los guiris...jejeje) pero si el exterior es impresionante el interior ya es de quedarte con torticolis y la boca abierta.
Pensé que para las niñas igual resultaría algo aburrido, pero resulta que con el precio de la entrada (menos mal) te dan unas audio-guías con las que estuvieron de lo más entretenidas: que si ahora hay que pulsar el 2, vamos a darle las dos a la vez...
Y así disfrutamos todo muchísimo de la visita.
Hasta vimos al papamoscas dar la una.
Toda la catedral es preciosa pero la Capilla de los Condestables es realmente impresionante.
Como veis me hinché a hacer fotos pero es que cada lugar que veía me parecía digno de inmortalizar.
También aprendimos muchas cosas como lo que significa "horror vacui" o "miedo al vacío" cuando al artista llena todo el espacio con multitud de adornos, sin dejar ni un solo hueco (yo atribuía el horror a otra cosa... jajaja y es que es pelín recargado pa' mi gusto).
Bueno, que así improvisadamente nos salió un plan de lo más chulo y es que a veces buscamos cosas fuera cuando bien cerquita tenemos unos tesoros increíbles.