martes, 24 de noviembre de 2009

La colección de máscaras de mi padre.

Hace ya tiempo que Anele escribió un post sobre unas auténticas obras de arte que había pintado ella misma, unas máscaras venecianas. Y Blas también accedió a nuestra petición de curiosidad y nos explicó la curiosa historia de una de esas máscaras, il nassone.
Todo ello me recordó la colección de máscaras de mi padre, no llega a la altura de su colección de belenes, pero no está mal. La verdad es que ya se hace difícil encontrar qué regalarle a mi padre y como le gusta tanto el teatro la máscara es una opción socorrida.
De hecho la mitad de la colección se la he ido regalando yo... jejeje.

Esta es la primera máscara que le regalamos, una auténtica máscara de teatro griego que le trajimos de nuestra luna de miel en Grecia.

Mi hermano, que no quiso ser menos, también le trajo una máscara tradicional de su luna de miel en Bali.
De nuestro primer viaje a Roma le trajimos esta máscara.

Pedro tuvo que ir a Roma "en solitario" a unas beatificaciones de su cole y le cogió esta otra que le cayó en su siguiente cunmpleaños.

Terminando con la "sección italiana" esta pequeña máscara vino de Florencia como recuerdo de nuestro maravilloso Crucero por el Mediterraneo.



Esta máscara tradicional méjicana no sabemos muy bien de dónde salió, pero aqui está aportando exotismo a la colección.


La máscara africana que véis no fuimos al continente negro a buscarla, es de un mercadillo solidario, pero creemos que efectivamente es originaria de allí.

Y por último esta máscara prehistórica la trajimos de nuestras vacaciones en Mallorca.


Estas las he dejado para el final porque son los intentos de mi padre por pintar una máscara. Yo creo que le fallan los materiales: los de la pintura y los de la máscara de base. Esta máscara la pintó él para un disfraz de demonio.


Esta otra sin embargo, que es una careta de los chinos de plástico, le quedó mucho más conseguida, esta vez para un disfraz del dios Baco.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

La amistad II parte: La amistad en la adolescencia.

No pretendo hacer un análisis profundo ni teórico de la materia, sino más bien una pequeña reflexión a partir de mi propia experiencia y de las que he visto a mi alrededor.

Como ya apuntaba Inma en el anterior post de la amistad en la infancia las amistades que haces en la adolescencia te marcan de por vida. En la adolescencia todo es "más", supongo que las hormonas revolucionadas hacen que todo lo que sientes se multiplique por mil y si un día no te mira te hundes en la miseria y crees que te morirás y si al día siguiente te roza la mano estás en el cielo y nunca, nunca pero nunca querrás a nadie como a él.

Lo mismo ocurre con las amistades, al menos en mi caso y creo que un poco en el de todos.

Te haces mayor (o eso crees tú) y deseas poner tierra de por medio con respecto a tus padres. Ellos no te comprenden, no te entienden, sólo tus amigas que pasan lo mismo que tú, que están en tu "misma onda" son capaces de comprenderte. Recuerdo muchísimo esas conversaciones interminables y ese "seremos amigas para siempre".
Aunque yo fui un poco atípica en este sentido. Santander es una ciudad de grupos bastante cerrados. En un viaje a Córdoba me sorprendió comprobar que mi amiga salí sin quedar antes!!!!! ya se encontraría a alguien... eso era algo impensable en Santander (si no querías quedarte más colgada que un chorizo) y a mi me encantaba tener varios grupos: tenía en grupo de Parayas para ir a hacer deporte, excursiones... tenía el grupo del "fichoteo" los fines de semana (consistía en quedarte en una cuesta apoyada en un coche "fichoteando" a tutti li mundi), tenía el grupo de la parroquia, el grupo del colegio...

En fins, tener tantos amigos tan repartidos se castigaba, y cosas como "no se puede contar contigo", no te llamamos porque como tú estás siempre por ahi... al final como suele decirse, el que mucho abarca poco aprieta.

Y si bien es cierto que he sufrido mucho por este tipo de comentarios (que a veces eran mucho peores) y nunca he sido mucho de "grupos de amigos", de todos los grupos siempre me llevaba una amiga personal. Con todo el grupo me llevana muy bien, pero siempre estaba ella, que era esa persona con la que tienes una relación especial, una conexión que no se produce con todo el mundo.

Han sido estas amigas especiales las que sí han sobrevivido al paso de los años, y después de un impás en el tiempo, hemos retomado el contacto como si los años no hubieran pasado.

Uno de los grandes obstáculos a superar en estas amistades adolescentes es la primera pareja, al menos así lo viví yo. Y es que a veces estas amistades son tan absorbentes como un novio celoso. También desde la otra parte cuando te enamoras por vez primera parece que no ves nada más allá de él y tiendes a separarte de tus amigas (craso error).

El tiempo es limitado y te encuentras en la dificl situación de mantener un equilibrio entre el tiempo que dedicas a tus amigas y el que dedicas a tu "novio" y lo hagas como lo hagas a una de las dos partes le parece escaso.

Lo ideal es cuando tu chico se encuentra en tu misma pandilla, pero esto no siempre ocurre así.

Claro, que con esto de la amistad y la pareja legaríamos a la tercera parte de estos posts sobre la amistad "La amistad en la madurez" qué ocurre con la amistad cuando te casas, formas tu propia familia, o cuando no te casas pero sí lo hacen el resto de tu amig@s...

jueves, 12 de noviembre de 2009

11 de Noviembre de 2009

Marta, a quien algun@s de vosotr@s conoceréis por ser fiel seguidora de una morena pecosa, me lanzó una propuesta el otro día: describir un día de mi vida, concretamente el 11 de Noviembre (el pasado miércoles) y aquí está. Un día en mi vida...



7:50
- Susana, son las ocho menos diez…
- Mmmmmm, ya voy….
No puede ser… apenas consigo abrir los ojos, ánimo Susana que ya es jueves…
- Irene, despierta, que hay que ir al cole…
- Mmmmmm, joooo, llama a Susana…
- Venga, anda, hoy te toca a ti ser la primera…
- Ráscame la espalda…
- Ya está, ahora levántate.
- Un poquito más…
- Ya, que luego vamos siempre tarde. Susana, levanta.
- Espera un poco.
- No, no espero. Ya.
Esta la razón de que me levante a las 7:50. Tener 10 minutos de “espera un poco”.

Después de media hora de “venga, come, que se te queda helado el colacao” distribuimos los itinerarios: Pedro lleva a Julia al médico que está (otra vez) con tos y yo llevo a las niñas a la guardería del cole a la que acuden una hora todos los días antes de entrar a clase a las 10:00 porque yo entro a las 9:00.

Normalmente llevaría yo a Julia al médico pero hoy tenemos reunión importante en el cole, el viernes tenemos la Magosta, una gran fiesta que celebra toda la Infantil junta en la que cantamos canciones de la tierruca, hacemos algún baile y asamos castañas que comemos entre todos. Es una fiesta muy bonita pero una auténtica movida de organización de padres, madres, decoración, ensayos de canciones y bailes, conseguir los hornillos, las bombonas, padres y madres que nos ayuden a picar castañas, hacer cucuruchos de papel de periódico, asarlas el día “D”.

Así que después de pasar la mañana entre lápices y pinturas, música e inglés, intentando prestar toda mi atención a 24 personitas a la vez recojo a mis tres princesas y volvemos a casa.

Hoy parece ser el día de las excepciones pues normalmente Asun que es mi tercera mano recoge a Julia y la va dando de comer y cuando yo llego a casa con Susana e Irene la comida está lista y la pequeña Julia ya casi ha terminado de comer.

Pero Asun tiene la famosísima gripe A y estará toda la semana guardando cama así que debo recoger a las tres e ir corriendo a casa, preparar la comida que ya dejé medio hecha el día anterior, darles de comer, comer yo, y casi sin tiempo para respirar volver a salir de casa. A las 15:00 llega Pedro que nos acompaña al cole, así me da tiempo a darle un beso rápido y que me cuente que le dijo el médico sobre Julia.

Por la tarde dos horas de clase. A las 17:38 cuando vino el último padre a recoger a su hijo comienzo las entrevistas, hoy es segundo miércoles de mes. Hasta las 20:00 recibo a padres y madres, algunos realmente preocupados por sus hijos, otros se esconden tras una máscara e inventan mil historias para disculpar la conducta de sus criaturas.

A la salida, mi momento de la semana. No están las niñas, Pedro se las llevó a las 17:30 y yo no tengo que ir al parque con las meriendas, o a la biblioteca, a música, a hacer algún deber para clase (aún muy pocos que son chiquitinas), ni baños, ni cenas…

A veces utilizo este rato para meterme en Internet, leer qué me cuentan mis amigas cibernáuticas, escribir algún post en mis blogs… pero hoy he quedado con Rebeca, mi burbuja de aire. Toda mujer necesita una amiga, alguien con quien compartir las confidencias más trascendentales, o las vanalidades más absurdas, pero para mí es tan necesario como el respirar.

En un par de horas recortamos y pegamos unas cuantas cartulinas haciendo tarjetas de Navidad, construyendo algunos sueños de un puñado de niños color café. Pero principalmente hablamos, charlamos, parloteamos, compartimos… nos comunicamos.

Las horas pasan como si fueran minutos y cuando quiero darme cuenta mi oído de madre ya detecta las voces de mis hijas cuando aún están en el primero (vivimos en un quinto sin ascensor).

Me despido de Rebeca y comienza el ritual de las noches. Pijama, cuento y oraciones. Al terminar…
- Buenas noches, que soñéis con los angelitos.
- Y tú mamá, y con el niño Jesús, y con San José, y… con todo lo que te digo siempre.
- Un beso mamá. (smuak) ¿Los besos se borran?
- No, no se borran.
- Ni aunque haga así (y toca su mejilla contra la almohada)
- Ni aunque hagas así.
- Por el juramento secreto.
Junta sus dedos índices y yo los desuno con un dedo.
- Por el juramento secreto.
Ahora le toca a ella desunir.
- Otro beso.
- Hasta mañana.
- Mamá ¿Cómo se duerme?
- Pues cierras los ojos y piensas en cosas bonitas.
- Mamá, ¿y en qué pienso?
- No se, en lo que más te guste… en que tenías una granja con caballos, perros y conejos.
- Buenas noches.
- Buenas noches.
- Te quiero mamá.
- Y yo a ti.
- Otro beso.
(smuak)
- ¿Mañana voy a tu cama?
- Si (si te voy a tener que levantar yo…)
- Buenas noches.
- Buenas noches.

lunes, 9 de noviembre de 2009

La amistad I parte: La amistad en la infancia.

Chema pensó en mi para darme un precioso premio sobre la amistad, cuyas reglas son las siguientes:
1. mencionar a la persona que te ha dado el premio y enlazar su blog.
2. conceder este premio a varios blogs.
3. responder al siguiente cuestionario, que consiste en citar:
- varias cosas (entre tres y cinco) que más valoras en la amistad.
- varios recuerdos relacionados con la amistad.
- varias cualidades que tienen en común tus amigos.
- varias cualidades que no tengas y que te gustaría tener.
4. Copiar el texto en que se explica el motivo del premio y sus normas.
Todo esto me ha hecho pensar mucho sobre lo que ha supuesto la amistad en mi vida y cómo ha cambiado con el paso de los años.
Me gustaría compartir con vosotros estas pequeñas reflexiones, en las que puede que os sintáis (o no) identificados.

Las primeras amistades:
Los recuerdos que guardo de mis primeras amistades no son muchos pero son todos muy agradables. Lo que más recuerdo son los cumpleaños (sí, esa que está ahí enseñando la campanilla soy yo...). Al principio, antes de tener unos amigos más definidos los invitados a mi cumple eran una amalgama de primos, hijos de amigos de mis padres, vecinos y un par de niñas de mi clase.
Recuerdo los ganchitos naranjas, los sanwiches de jamón y queso rebozados, las medias noches de margarina y chorizo, la tarta... y los detallitos que regalábamos en cada cumple.
Recuerdo a Paula como amiga inseparable desde que entramos en el cole con cuatro añitos y mi vecina Ana Belén con la que bajaba al patio a jugar a "los cacharritos": las hojas más grandes eran filetes, las hierbecitas espaguetis, si rascabas la pared sacabas la sal...
Aquí estamos las dos vestidas de enfermeras en un cumpleaños (atención al papel del salón... auténtico, auténtico).
En estas primeras amistades, ahora ya como maestra, he podido observar grandes diferencias entre los niños y las niñas.

Ellos se juntan para jugar al futbol o a los coches, el juego es lo que les une y si tienen alguna discrepancia una buena pelea y asunto solucionado, al momento tan amigos.

Pero... ¡ay, las niñas...! Nuestra mente va mucho más allá que la de ellos, que no tienen malicia ni envés. Las niñas de cinco añitos de edad son capaces de las mayores intrigas palaciegas, de hacer el vacío a una del grupo por la causa más superficial u obligarla a vestir de determinada forma bajo la "presión del grupo"...

Una vez asistí asombrada a una auténtica maquinación maquiavélica: tres niñas llorando desconsoladas porque una cuarta les había pegado... ¡¡¡y era mentira!!!!

Claro, que aún peor es lo que vivió mi hermano también con unos 4 añitos. Una niña de su clase fue diciendo a sus padres que mi hermano le levantaba las faldas para verle las bragas y que una vez había llegado hasta a bajárselas. Mi hermano no sabía cómo repetir que aquello era mentira...

Al final resultó que la niña quería vengarse de mi hermano porque le estaba "quitando" al chico que le gustaba de estar con ella (el chico que le gustaba era el amigo íntimo de mi hermano).

En fins, que me fui por las ramas como siempre y yo lo que quería decir es que ya en la primera infancia se observan diferencias entre la amistad entre niños y niñas.

Si bien al comienzo les da igual el sexo y juegan juntos por igual, a medida que van pasando los años se van "organizando" por sexos.

Aunque aquí tiene mucho que ver el tipo de juego que le guste al niño/a en cuestion. He tenido niñas-chicote en clase a las que les encanta jugar al futbol y a los coches y por esta razón siempre van con niños. En Infantil no hay problema, pero a medida que avanzan los años si no han establecido relaciones con las chicas luego les resulta más dificil.

Y lo mismo ocurre al contrario con chicos que son más de juegos tranquilos y que disfrutan mucho más jugando a los bebés que dándole patadas a un balón.

Pero esta separación por sexos tiene un tiempo de finalización porque cuando llega la adolescencia... nos volvemos a juntar y es aquí donde la amistad cobra un papel fundamental.

Y a todo esto yo me he enrollado como siempre y no he seguido las reglas del premio, pero es que este tema da mucho de sí, de hecho creo que lo voy a dejar en este primer capítulo (que me reclaman mis hijas) y mañana continuaré con... La amistad en la adolescencia.

sábado, 7 de noviembre de 2009

La historia de la humanidad contada por los clicks

El otro día mi hija Susana trajo de la biblioteca del cole el libro que aparece en la fotografía.

Aluciné en colorines porque lo escogió sin que hubiera ninguna mediación materna de por medio, y en seguida pensé en "el tito David".

El libro no está mal, aunque teniendo en cuenta todo lo que tienen los clicks y lo que pude ver en la exposición se me hace un poco pobre. Pensé que sería porque es antiguo pero veo que es del 2006 así que no tienen perdón. La parte de la civilización egipcia es pobrísima teniendo en cuenta todo lo que hay de los clicks sobre el tema.

He visto que este mismo autor ha publicado recientemente otro libro del mismo estilo titulado "La gran aventura de los animales con Playmobil"
Pues nada, David, ya tienes una idea más para poner en tu carta a los reyes Magos.
Bueno, tú y todos los fans de playmobil, que por aquí hay unos cuantos ¿verdad Eva?

lunes, 2 de noviembre de 2009

Un sueño

Ya sabéis que ultimamente colaboro con un orfanato de Kenia. Este verano una amiga mía tuvo la oportunidad (y la generosidad) de ir a colaborar como voluntaria y pudimos vivir un poco más de cerca esta realidad.

Podéis leer su experiencia aqui.

África es un pozo sin fondo de necesidades y como cuando tiras de un hilo detrás de una siempre hay muchas más. Si Likoni es un orfanato con mucho todavía en lo que trabajar no os podéis imaginar la situación de los niños que ni siquiera tienen la oportunidad de acudir a un centro y se ven obligados a recorrer las calles de Mombassa pidiendo dinero.

Así, un sueño ha ido forjándose, entre los voluntarios que han acudido este verano a kenia, entre los "colaboradores" que nos quedamos en España con ganas de ir... construir nuestra propia escuela-orfanato en Kenia.

Y hemos encontrado el lugar, en una aldea llamada Ukunda, cerca de Mombassa y de Likoni. El presupuesto inicial es de 12.000 euros, algo irrisorio, si lo comparamos con lo que nos costaría construir algo parecido en España, pero aún así es mucho dinero. Para comenzar la casa podría dar cobijo a 50 niños, dando prioridad a los niños que piden limosna y viven en las calles y a los de las aldeas más pobres.

Para que el orfanato sea autosuficiente y poder pagar el sueldo de los empleados se adquirirán pollos y vacas y se plantará un huerto.

También nos gustaría comprar máquinas de coser para que los adultos y niños mayores a hagan y vendan los uniformes escolares.
Cuando comento emocionada nuestros nuevos proyectos siempre surgen las voces de la incredulidad o del desaliento, que si adonde nos vamos a meter, que si acaso no habrá en España también necesidades que cubrir, que es muy complicado...
Gracias a Dios tenemos un ángel de la guarda en este proyecto y esa es mi amiga Susanna, una maestra catalana a la que conozco gracias a este invento maravilloso que es internet que nos ha unido a personas de Cataluña, de Cantabria, de Canarias, de Alemania, Italia, Suiza... y un montón de nacionalidades más. Todas con un sueño común.

Ella es el "alma mater" de este proyecto y de mucho otros como la construcción de un dispensario médico en la aldea de Tsunza, el apadrinamiento de niños de esta aldea...
Los sueños y el trabajo se multiplica, pero con el trabajo también van apareciendo personas maravillosas que de pronto surgen con ganas de colaborar, que se enganchan y se enamoran de todo esto como lo hice yo, que aquí me vi metida y gracias a esta pequeña pantalla ahora me siento parte de todo esto, implicándome en la vida de un pequeño trozo de tierra. Sé que no puedo ayudar a todo el mundo pues al menos centraré mis esfuerzos aquí. ¿Por qué aquí? Pues no se, yo que soy creyente creo que Dios me ha llamado a estar en este sitio, habrá quien crea que ha sido el destino o la casualidad.

En esta página encontraréis toda la información más detallada.

Si alguien lee este mensaje y se siente llamado o tocado de alguna forma y desea colaborar apadrinando a algún niño (son sólo 60 euros anuales para pagar su matrícula, uniforme, libros y material escolar...), haciendo una donación o incluso acudiendo como voluntario que se ponga en contacto conmigo susamone@yahoo.es

Identik DIY

Hoy os traigo un juego no sólo muy divertido sino que además es estupendo para desarrollar la inteligencia lingüística. Se llama "...