Deluz

Siempre que pasábamos por delante con el coche me quedaba como boba admirando su jardín. Cuando más bella estaba era al atardecer, ya habían encendido farolillos y antorchas iluminando el camino.

La chicas, deslumbrantes, tomaban una copa, los chicos, siempre impecables, las acompañaban.

Todo parecía sacado de una película.

Y aquel día él me hizo la protagonista del film.

- "¿Desean tomar un aperitivo en la biblioteca antes de comer?" "Por favor, permítanme los abrigos" "Es de su agrado esta mesa con vistas al jardín?"

Y cuando nos sentamos a la mesa para probar un delicioso hojaldre de setas con cebolla caramelizada y queso ... no se qué... me doy cuenta de que la cámara de fotos se ha quedado en el bolsillo de mi abrigo.

En fins, creo que rompería todo el encanto que yo le dijera al camarero que tan amablemente nos atendió que por favor me diera el abrigo pues tenía que sacarle una foto a este magnífico plato (antes de hincarle el diente) para ponerlo en mi blog.

Me imagino su cara al decírselo... o al verme sacar una foto del plato... y decido disfrutar del maravilloso sitio, la compañía perfecta y de la lasaña de marisco y el sorbete de limón al cava... por los 20 euros del menú...

Altamente recomendable.

Para una sorpresa, para una cita especial, para un porque si (esta es la mejor razón de todas)

P.D. Guiño para mi tocaya Susana. Que es eso que luce en mi solapa ¿será una joya de diseño? no, es mucho más valioso, es un precioso buho que me han hecho con muñeca dolorida y todo el cariño del mundo. Muchas gracias artista.